Buenos Aires, 8 de febrero de 2022. Para el horóscopo chino, diferente del que nosotros heredamos de los babilónicos a través de los romanos, el año que comienza viene bajo la advocación del Tigre y muchos tienen puestas las esperanzas que en esta nueva etapa (que terminará el 23 de enero de 2023) traiga, esta vez sí, muchos cambios para bien. En el pensamiento chino tradicional, cada año se asocia a uno de doce animales, pero también a uno de cinco elementos. Por eso este, que para ellos es el año 4.719, es el año del Tigre de Agua.

Si para muchos China es una novedad reciente y hasta exótica, su creciente volumen económico en el mundo, la rapidez de su desarrollo y lo avanzado de su ciencia y tecnología, la convirtieron en un foco de atracción indudable. Pero los antiguos rastros de su influencia en las culturas llamadas de “occidente”, son muchos y hasta se han naturalizado como parte de nuestra cultura. 

La Ruta de la Seda enlazó el mundo desde hace milenios porque el producto exótico se configuró en un símbolo de lujo desde los tiempos de la Roma imperial; igual que la porcelana, otro invento chino. Pero no fueron los únicos productos originales de aquel pueblo que se han consolidado en nuestras prácticas cotidianas. No sólo inventaron el papel (hecho con paja de arroz), sino también el papel moneda, que todas las naciones usan en el presente. Lo mismo que la soja, cuyo cultivo revolucionó nuestras pampas, es una planta de origen chino. Sin olvidar que chino se ha convertido en sinónimo de supermercado en nuestros barrios y muchos países del mundo.

Además es la nación más antigua en estos momentos, en contar con un estado unificado en forma continua por casi tres mil años. Una cifra inmensa comparada con nuestros 200 años de historia nacional. Pero no sólo es pasado. En muchos terrenos cruciales de la vida moderna, China es hoy el futuro. Un ejemplo lo demuestra. En estas semanas hubo dudas en Estados Unidos en los operadores aéreos con el inicio del funcionamiento de las redes de 5G en la telefonía móvil. Temían que afectase los instrumentos de vuelo de los aviones. En tanto en China ya hay más de 595 millones de usuarios conectados a 5G y no fue afectado ningún avión.  ¡Esperemos que el Tigre de Agua traiga buenos augurios también para nuestra patria!

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