Comunales | Más allanamientos en el barrio de Once
El problema es la mafia detrás de los manteros
La Policía Metropolitana desplegó el jueves un nuevo operativo en el barrio de Once en el marco de los allanamientos que viene realizando por orden judicial en busca de presunta mercadería ilegal que luego venden los manteros. En tanto, el vicepresidente primero de Fecoba denunció que en el país hay 522 saladitas distribuidas en 111 localidades y que el negocio de la venta ilegal movió en enero 1.800 millones. Buenos Aires, 24 de febrero de 2014. En busca de la presunta mercadería ilegal que luego venden los denominados manteros, la Policía Metropolitana desplegó el jueves pasado un nuevo operativo en el barrio de Once.
En esa oportunidad, el procedimiento se realizó en un depósito ubicado en Sarmiento al 2800, entre la avenida Pueyrredón y Boulogne Sur Mer, a metros de la estación de trenes, según informaron fuentes de la fuerza de seguridad porteña.
Este allanamiento es la continuidad de otros que se cumplieron desde fines de enero, cuando el gobierno de la ciudad de Buenos Aires dispuso el desalojo de los vendedores que comercializan distintos productos en las veredas de Once.
En la zona fue desplegado un importante operativo del que participan efectivos del cuerpo de Infantería de la Metropolitana. Debido al procedimiento, estuvo cerrada al tránsito durante la mañana la calle Sarmiento entre Pueyrredón y Boulogne Sur Mer.
EL PROBLEMA ES LA MAFIA DETRÁS DE LOS MANTEROS
Las mafias que están detrás de la venta ilegal callejera no tienen nada que ver con la indigencia. Los verdaderos dueños del negocio son millonarios y usan a inmigrantes vulnerables para explotarlos, dijo el empresario Vicente Lourenzo, vicepresidente de la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba) y a cargo de la comunicación de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
En pleno combate contra la venta ilegal callejera en la Ciudad, Lourenzo representa a los empresarios del sector que se sienten perjudicados por los manteros. En la charla desarrolló un argumento similar al de los empresarios del juego: todo lo que es dinero negro deja de tributar y, por ende, de retornar hacia la inversión estatal en salud, educación y vivienda.
Para Lourenzo, la desactivación de los verdaderos dueños del negocio, como él los llama, solo depende de una decisión política. Como buen contador, muestra el conflicto o su mirada sectorial de él en números. Asegura que, en todo el país, hay unas 522 saladitas distribuidas en 111 ciudades. A no confundirse, este no es solo un problema de la Ciudad de Buenos Aires, subraya. Solamente durante enero, afirma, la venta ilegal sumó 1.800 millones de pesos. En la misma línea, calcula que el negocio mantero en la Ciudad mueve 250 millones de pesos, con lo que el Estado porteño deja de percibir unos 6 millones de pesos por mes. Imaginemos todo lo que se podría hacer con ese dinero: hospitales, infraestructura, transporte, señala.
A principios de febrero, condenaron a una mujer que lucraba en la zona de Retiro. La acusaron de organizar una importante red comercial y contar con varias propiedades. La Justicia contravencional falló en su contra se trató de una mujer de nacionalidad boliviana buscando que la medida sea ejemplar hacia el resto de los vendedores infractores.
Lourenzo asegura que, detrás de aquella embestida, hubo una fiscal con los ovarios bien puestos porque hizo toda una inteligencia previa antes de hacer los decomisos. Está atacando el verdadero corazón del negocio, no siempre tenemos una Justicia tan valiente, dice. La fiscal en cuestión es Verónica Guagnino.
Está dando con los verdaderos dueños del negocio, que son quienes explotan a los más vulnerables. En general, como son extranjeros, son más fáciles de precarizar. Y cuando hablo de mafia me refiero a bandas de piratas del asfalto que roban cargamentos de ropa; gente que ocupa casas en barrios Flores es una base de operaciones bastante común y pone un taller clandestino. Agrega: Hablamos de trabajo esclavo y camas calientes: explotación extrema. Esta gente que es reclutada ni siquiera es la que tira piedras cuando viene la policía a decomisar la mercadería. Los verdaderos dueños del negocio utilizan grupos de choque, que son los que atacan a la policía. Te puedo asegurar que la impunidad es total. Si a mí me dan hoy 20 o 30 cargamentos de jeans robados de camiones, los vendo en pocos días sin que nadie me pregunte absolutamente nada. Contundente.
Dejanos tu comentario
Más notas Comunales
-
20 años de Cromañón Varios actos y un reclamo
-
20 años de Cromañón La mayor tragedia argentina
-
Cromañón espacio de memoria Expropiación demorada
-
A 73 años de su muerte Discépolo sigue vivo
-
Después de 36 años Cerró el Teatro Luisa Vehil
-
Mapa del delito Balvanera encabeza
-
Manzana 66 - Plaza de los Vecinos Primer paso para oficializar el nombre
-
Homenaje a los 12 de la Santa Cruz “Rebelarse es el camino”
Notas mas leidas
- 02 Feb
- 25 Jul
- 03 Sep
- 11 Feb
- 07 Jul
- 01 Dec