Buenos Aires, 9 de julio de 2024. En 1872 cuando éste era diputado provincial y gracias a sus influencias, Yrigoyen fue nombrado Comisario de Policía de su parroquia de Balvanera y años más tarde fue elegido dos veces diputado provincial. Fue uno de los fundadores de la Unión Cívica Radical (UCR) y presidente del Comité de la Provincia de Buenos Aires. Como tal, participó activamente en las revoluciones de 1890 y 1893.

A pesar del afecto que sentía por Alem, Yrigoyen desconfiaba de sus condiciones para el liderazgo del Partido, lo que lo llevó a enfrentarlo políticamente y a organizar la UCR de la provincia de Buenos Aires como un partido político autónomo. Finalmente se distanció de él y abandonó la casa familiar.

Con la Ley Sáenz Peña de 1912, la UCR volvió a participar de las elecciones luego de años de abstención electoral. En los comicios de 1916 Yrigoyen resultó electo presidente de la República con el 45,6 por ciento de los votos. Su política no introdujo novedades sustanciales en la economía argentina y sus preocupaciones eran esencialmente político-institucionales.

Hitos de la primera presidencia de Yrigoyen fueron su reforma universitaria que permitió una administración más democrática de las facultades y el uso de la represión policial y militar para terminar con las protestas obreras de 1919 en la Semana Trágica que tuvo como escenario el territorio de nuestra Comuna 3 y las huelgas de 1921 en la Patagonia.

Después del período de gobierno de Marcelo T. de Alvear, Hipólito volvió a presentar su candidatura en las elecciones nacionales del 1de abril de 1928, ganando por una diferencia de votos tal que le permitió la organización de un gobierno más popular, integrado en mayor medida por representantes de las clases medias en ascenso.

Pero pronto aparecieron las dificultades: en 1929 se produjo la gran crisis económica mundial y el radicalismo dirigido por Yrigoyen no supo responder a los desafíos socio-políticos que se presentaban. Rápidamente la clase media -clave para su llegada al poder- dejó de respaldarlo, y a un año y medio de iniciado la debilidad del gobierno era crítica. 

El 1 de agosto de 1930 desde la empresa estatal YPF se tomó la decisión de intervenir en el mercado petrolero para fijar el precio y romper con los monopolios extranjeros. Esto activó procesos golpistas en marcha y un mes después, el 6 de septiembre, Yrigoyen fue depuesto por el primer golpe de estado de la época constitucional que encabezó el general Uriburu apoyado por la prensa, el ejército y la oposición conservadora. Fue encarcelado sin proceso judicial durante un año y tres meses en la Isla Martín García. Anciano, pobre y enfermo regresó a Buenos Aires donde falleció meses después.

                                                                                                         Norberto Alonso

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