Buenos Aires, 22 de agosto de 2023. Agentes del Departamento Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina, junto a la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA) del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires clausuraron un criadero ilegal de perros que funcionaba en el barrio porteño de Balvanera.

El operativo se concretó en un domicilio de la esquina de las calles Catamarca y Venezuela, donde funcionaba un criadero ilegal de perros "Shiba Inu", la más pequeña de las seis razas, originarias de Japón. Los canes se encontraban "hacinados y enjaulados" en mínimos recintos situados en la vivienda, por lo que se efectuó su rescate y traslado a un refugio transitorio, para evaluar su estado de salud, informaron fuentes del operativo.

Tras denuncias recibidas por vecinos del barrio de Balvanera, sobre "la existencia de intensos ladridos de lamento de verdaderas jaurías de perros" y el dato de que "en el domicilio podría funcionar un criadero de perros", se dio lugar a la investigación.

Por esta razón, el personal policial, con intervención de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFIMA) a cargo de Carlos Rolero Santurian, efectuó la tarea de investigación a través de distintas páginas web, logrando constatar los términos de las denuncias y "la posible venta de cachorros de esa raza".

Al ordenarse el allanamiento, a pesar de la resistencia de la propietaria de la vivienda, se encontraron un total de veintitrés perros de raza "Shiba Inu", tanto adultos como cachorros. Los animales "se encontraban encerrados y hacinados en jaulas pequeñas, con claros signos de sufrimientos y maltratos, pese a la prohibición que rige al respecto en toda la Ciudad de Buenos Aires", detalló un comunicado sobre el operativo.

Estos perros, originalmente criados para la caza, se volvieron muy preciados para la venta en los últimos años, a través del lanzamiento por parte del multimillonario Elon Musk, de la criptomoneda "DOGE", la cual justamente tiene como logo un Shiba Inu, estimándose que el valor de venta de cada uno de los canes en nuestro país asciende a unos 1.000 dólares.

La Fiscalía Ambiental imputó a la dueña del lugar por el delito de Infracción a la Ley 14.346, de Maltrato Animal, al determinarse que adquiría las hembras y machos a través de la Fundación Cinológica Argentina, para luego hacerlos reproducir en el domicilio indefinidamente, manteniéndolos en jaulas hasta lograr su comercialización.

El 12 de junio de 2020 hubo otro operativo similar, a pocas cuadras del ocurrido el viernes pasado. Por orden de la justicia rescataron de una casa del barrio de Balvanera 22 perros siberianos y bulldog francés e inglés. Los animales, entre los que había cachorros recién nacidos, estaban hacinados en medio de sus propias heces. El hecho ocurrió en una casa con peligro de derrumbe, ubicada en la calle Bartolomé Mitre al 3100, en el barrio de Balvanera.

 

Allí se hizo presente el personal del Departamento Contravenciones y Faltas de la División Investigaciones Delictivas de la Policía de la Ciudad para realizar un allanamiento por infracción a la Ley Nacional N°14.346. La casa allanada estaba en estado de abandono y con aparente peligro estructural. Tenía dos plantas con tres habitaciones en cada una donde los perros estaban separados por razas. Había siberianos y bulldog francés e inglés de distintas edades. Algunos de ellos recién nacidos.

 

Desde hacía tiempo, los vecinos denunciaban a esa propiedad por malos olores, lo que derivó en la intervención de la Justicia en conjunto con asociaciones protectoras de los animales. Los perros se reproducían de manera intensiva para la venta por valores de entre 30 y 60 mil pesos.

 

Una mujer de 21 años y un hombre de 31 cuidaban el lugar y enfrentaron una causa por explotación animal. Ambos quedaron a disposición de la Unidad Fiscal Especializada en Medio Ambiente, a cargo de Ricardo Bomparola, bajo cuyas órdenes se realizó el operativo. La Justicia deberá investigar si ellos son los dueños del negocio o solamente empleados.

 

Del allanamiento participó personal de la Dirección General de Fiscalización y Control, la Unidad Oficina de Fiscalizaciones Integrales, la División Canes de la Policía de la Ciudad, la ONG de defensa de los derechos de los animales, “Soplo de Vida”; y personal de Bomberos de la Ciudad para asegurar la estructura de la vivienda por el peligro de derrumbe.

 

Por disposición de la fiscalía los perros fueron retirados del lugar y derivados, según los casos, a centros veterinarios y a hogares de tránsito al cuidado de personas en calidad de depositarios judiciales.

 

Además del secuestro de una serie de objetos hallados en el lugar, se ordenó la "clausura preventiva judicial" de la vivienda.

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