Porteñas | Otro apagón masivo

El cuento de las tarifas

El miércoles 5 de marzo la ciudad tuvo el mayor apagón en una década, justo en medio de una despiadada ola de calor extremo. Millones de personas en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, mayormente clientes de la distribuidora Edesur, se vieron afectadas por dos apagones masivos ocurridos en menos de 24 horas este miércoles. Con las mismas tarifas, Edenor mostró una mejor respuesta. Buenos Aires, 11 de marzo de 2025. La red energética de Capital y el Conurbano colapsó nuevamente el miércoles 5 al mediodía y provocó el segundo gran apagón de la jornada, paradójicamente en el “Día de la Eficiencia Energética” y en medio de una ola de calor que llegó a 47° de sensación térmica en la Ciudad. El anterior apagón de esta magnitud fue en 2014. La Casa Rosada, el ministerio de Economía, la Legislatura y el Congreso se quedaron sin luz y el microcentro fue un caos porque no funcionaron los semáforos durante horas y no había agentes de tránsito gestionando la circulación.

La jornada comenzó con un masivo apagón pasadas las 5 de la mañana, cuando se desengancharon del sistema dos líneas de alta tensión y quedaron sin luz alrededor de 550.000 usuarios de Edesur. La primera caída del sistema afectó a varias líneas de subte y a los ferrocarriles Roca y Mitre, al tiempo que muchos semáforos dejaron de funcionar y algunas escuelas suspendieron clases.

Pasadas las 7:30 la situación comenzó a normalizarse y Edesur informó que hubo “una falla en dos líneas de alta tensión, lo que afectó a varias subestaciones”. A las 9 seguían los problemas especialmente en la zona sur del Conurbano, pero no había datos oficiales porque la página del ENRE también estaba caída.

El desbarajuste volvió apenas pasadas las 13 horas, cuando la sensación térmica superaba los 40 grados, y el sistema colapsó nuevamente. Fuentes del sector dijeron que esta vez el apagón afectaba a usuarios de ambas empresas. Según datos oficiales, sumaban más de 620.000 domicilios. Pasadas las 15 horas, todavía quedaban 366 mil hogares sin luz.

La mega falla se debió, según informes periodísticos, a que se desenganchó una turbina a gas de Central Puerto y toda la central Costanera por la salida de servicio de líneas de trasmisión de alta tensión.  Así, la demanda se desplomó a esa hora pese al calor agobiante. “El corte que está ocurriendo en este momento obedece a una falla en dos líneas de alta tensión de 220 KV de Costanera-Hudson, propios del sistema de distribución de la empresa Edesur. Afecta el sur del GBA y sur de CABA. Hay 800 MW de corte de servicio y 2.500 MW de generación fuera de servicio”, informó la Secretaría de Energía.

El segundo apagón volvió a afectar a los subtes que interrumpieron total o parcialmente el servicio, con los pasajeros atrapados en las formaciones. Lo mismo sucedió con los semáforos en gran parte de la Ciudad, generando gigantescos embotellamientos. Al día siguiente, vecinos de distintos barrios porteños protestaban aún por la falta de suministro eléctrico. En algunos casos denunciaron que hacía cinco días que se encontraban a oscuras. Los afectados, principalmente de Boedo y Balvanera, realizaron cacerolazos y cortes de calle ante la falta de luz.

Dos días después, el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) reportaba unos 12.727 clientes sin luz en el área concesionada a Edesur. La mayoría estaban localizados en la zona sur del conurbano bonaerense. Había apagones con cientos de afectados en Balvanera (Comuna 3), Retiro, Monserrat, San Nicolás (Comuna 1) y Villa Soldati (Comuna 8).

Un problema de larga data

El problema de fondo sigue siendo la falta de inversión especialmente en el segmento de transporte, a pesar de los fenomenales aumentos autorizados por el gobierno de Milei. Además, la administración nacional frenó los proyectos AMBA I y AMBA II, que tenían cerrada la inversión con China.

Los problemas también afectan al segmento de generación: este miércoles se estaban importando 2000mw desde Brasil para tratar de hacer frente a una demanda que estaba al borde de ser récord histórico. El colapso a principios de marzo fue una consecuencia muy previsible de la errática gestión del gobierno libertario en temas de energía. El argumento del retraso de las tarifas se cae solo cuando se comprueba el diferente desempeño de ambas empresas que proveen al AMBA, con igual tarifa.

Según los últimos datos del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), relevados entre marzo y agosto de 2024, los usuarios con peor calidad de servicio se concentran en municipios del sur del conurbano bonaerense y en la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires. Todos ellos dependen de Edesur, la distribuidora con el peor servicio en frecuencia y duración de las interrupciones.

Para medir la calidad del servicio eléctrico, el ENRE utiliza dos indicadores principales:
-    SAIFI (System Average Interruption Frequency Index): refleja la cantidad de cortes de luz que sufre un usuario en promedio durante un semestre.
-    SAIDI (System Average Interruption Duration Index): mide el tiempo total que un usuario pasa sin electricidad en ese período, en horas.

En la ciudad, la Comuna 4 (La Boca, Barracas, Parque Patricios y Nueva Pompeya) encabeza el ranking de los barrios con peor calidad del suministro eléctrico. En algunas zonas, los usuarios pasaron en promedio más de 30 horas sin electricidad en solo seis meses. Detrás de Comuna 4, se ubican con los peores registros Comuna 7 (Flores, Parque Chacabuco), Comuna 10 (Floresta, Monte Castro, Vélez Sarsfield, Versalles, Villa Luro y Villa Real), Comuna 5 (Almagro, Boedo) y Comuna 3 (Balvanera, San Cristóbal).

                                    Santiago Pujol



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