Buenos Aires, 3 de marzo de 2020. En enero del año pasado comenzó a operar la empresa brasileña Tembici el sistema de bicicletas públicas gratuitas de la Ciudad. La nueva operadora vino con bicicletas de nuevo diseño y renovó también las estaciones instaladas en diferentes puntos de la ciudad. De acuerdo con el gobierno, debía expandir el servicio paulatinamente, hasta llegar a 400 estaciones, con 4000 bicicletas disponibles.

De por sí, era un número escaso, teniendo en cuenta que el sistema ya tiene 615 mil usuarios registrados, uno de cada cinco porteños. De partida, 4 bicis por cada 615 potenciales usuarios tienen sabor a nada. Sobre todo en momentos que hay mayor demanda, porque se va al trabajo o a la escuela, o se sale de paseo.   

Pero resulta que nunca se llegó siquiera a ese número. En parte, porque para responder al eventual uso abusivo o hurto de las bicis, comenzaron a ponerles localizador por GPS, luego de instaladas. Para lo cual, las bicicletas pasan un par de días en el taller. Es lo que le dijeron a Clarín desde la Secretaría de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad, según publicó el 9 de enero. “La idea es detectar la ubicación del rodado para mejorar la logística y funcionamiento del sistema", explicaron. Aunque tarde, no está mal para evitar avivadas.

También, claro, las bicis sufren deterioros por el uso constante. Y requieren reparaciones. Aunque el sistema tendría que tener un excedente de reposición automática para mantener un número de bicis disponibles constante. Pero los usuarios detectaron otra cosa. "¿Sentís que cada vez es más difícil conseguir bicicletas? No es sólo tu impresión, el sistema cada vez tiene menos bicicletas." La sentencia expresada en las redes sociales es de un usuario del sistema Ecobici de la Gobierno de la Ciudad y refleja que lo piensan muchos de ellos. 

Curioso y obsesivo un usuario realizó un relevamiento a partir de los datos que ofrece la aplicación oficial, y denunció que desde agosto hasta enero la cantidad de bicicletas disponibles se redujo de 2.500 a 1.000 y lo compartió junto a un gráfico que muestra cómo, paralelamente, la cantidad de estaciones vacías fue en aumento. Las "menos de 1000" bicicletas utilizables que denunció, dan unas 1500 usables, muy lejos de las 4000, que según las autoridades debería estar disponibles en las 400 estaciones. ¿A quién creerle? La cuestión es que las  bicis no aparecen y que conseguirlas se convirtió en otra lotería. 

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