Buenos Aires, 23 de abril de 2019. Miles de personas se acercaron el viernes pasado a la Parroquia Nuestra Señora de Balvanera, donde se encuentra el Santuario de San Expedito, a pedirle y agradecerle al santo de las causas justas y urgentes, cuyo día se celebra cada 19 de abril. Desde dos días antes ya había fieles esperando para orarle al santo en su día. El viernes a primeras horas de la mañana se registraban ya más de ocho cuadras de cola."Vengo por la familia, por el trabajo. Hay que ser un agradecido de tener trabajo. Vengo por los amigos, por todos", dijo uno de los fieles.

Bajo el lema "San Expedito ayúdanos a seguir a Cristo", el ingreso y egreso de los peregrinos fue constante desde las primeras horas del día por la calle Bartolomé Mitre y Azcuénaga. Fuentes de la parroquia citadas por el portal de Crónica señalaron un número cercano a las 100 mil personas que pasaron por el santuario, en parte incrementado este año por la coincidencia de las dos fechas religiosas. A raíz de esa coincidencia, para el tradicional Vía Crucis de la tarde del Viernes Santo se decidió llevar por las calles del barrio la imagen del santo.

"Este año coincide con el Viernes Santo, día que hacemos presente la entrega de Cristo en la Cruz, por eso como San Expedito abrazó la cruz y la llevó en sus manos, nosotros también imitándolo queremos seguir a Cristo abrazando al que sufre", destacó el párroco de la Iglesia Nuestra Señora de Balvanera, Walter Marchetti. San Expedito es el patrono de las causas urgentes y también se lo considera patrono de los jóvenes, socorro de los estudiantes, mediador en procesos y juicios, y protector de la familia y de los enfermos. "Vengo a colaborar con San Expedito, en agradecimiento por todas las gracias recibidas por él", manifestó una mujer y un hombre expresó "Vengo pidiendo paz para el país y que se solucionen muchos temas que estamos pasando hoy".

Según la creencia popular, provenía de una familia patricia, siguió la carrera militar y llegó a ser Comandante de las legiones romanas. Si bien gozaba de los privilegios de las clases superiores, fue ganado por la fe a medida que iba conociendo la prédica y el testimonio de los cristianos. "Normalmente, la gente viene a pedir y a agradecer porque tienen conciencia, la gente es agradecida. Evidentemente, al ser humano cuando le aprieta el zapato suele pedir, todos somos así, en una situación de dificultad enseguida pedimos pero la misma gente da las gracias, es mitad y mitad, depende las circunstancias que viven en ese momento", describió el cura párroco.  

"Cuando miramos la cruz de Cristo, vemos también el sufrimiento y el dolor de tantos hermanos y hermanas que caminan junto a nosotros. Cuando abrazamos al hermano que sufre compartimos su vida y podemos sentir su dolor", agregó. El sacerdote pidió a los peregrinos que acercarse a "los hermanos que sufren cualquier tipo de dolor y abrazarlos" e invitó a "hacer una ofrenda de alimentos no perecederos para ayudar a tantos hermanos que pasan hambre". "Cuando compartimos y ayudamos a nuestros hermanos nos ponemos del lado del que sufre y no del que hace sufrir. Que Dios los bendiga y que, a través de San Expedito, nos reencontremos con Jesús en esta Semana Santa", concluyó. 

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