Buenos Aires, 16 de abril de 2019. Resuelta la jurisdicción actuante, se espera que en las próximas horas den comienzo las pericias judiciales y estudios del terreno en el derrumbado edificio de Pavón al 3000 del barrio de San Cristóbal, en la Capital Federal, ocurrido el 1º de abril último, y a raíz del cual perdió la vida el joven Adrián Continiello, de 32 años, sonidista de la Televisión Pública, según indicaron fuentes allegadas a la querella.

Entre las primeras medidas tomadas por la justicia nacional en lo Criminal y Correccional se contaron diversos allanamientos, como también el secuestro de documentación referida a la obra lindera al desmoronado edificio de tres plantas, correspondiente a la empresa constructora, al estudio de arquitectura y a la Dirección General de Registro de Obras y Catastro del Gobierno porteño.

El viernes 5 de abril se produjo la unificación de la causa y también tuvo lugar una audiencia por la cual el expediente pasó a la órbita de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, durante la cual también se acordó la realización de "medidas urgentes" para evitar nuevos derrumbes en la zona.

Según señaló el doctor Jorge Monastersky, abogado de la novia del joven fallecido, el objetivo de las pericias es establecer y que "queden plasmadas las irregularidades que cometió la constructora, y analizar las responsabilidades penales de la empresa y también de las personas que debían controlar el proceso de construcción". Para ello, el abogado Monastersky nombró al ingeniero José Épstein, un profesional de reconocida trayectoria.

Por su parte, la justicia convocó a un especialista propuesto por la Universidad de Buenos Aires a fin de que sea éste quien realice dichas pericias en el edificio por la parte oficial.

La futura esposa del fallecido Continiello, María Mercedes Casas (quien convivió casi tres años con su pareja y estaban próximos a contraer enlace), solicitó por su parte ser tenida como querellante en la causa, habida cuenta del tiempo de convivencia transcurrido con su pareja, fallecida en el derrumbe.

La causa judicial está caratulada como homicidio culposo y recayó inicialmente en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Número 9 a cargo de Martín Peluso. Al transferirse a la esfera de la justicia porteña, el expediente fue girado al Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas nº 4, a cargo de la Dra. Graciela Dalmas. La fiscal que estará a cargo de la investigación es Daniela Dupuy, titular de la Fiscalía nº 12.

Los imputados en este expediente son, hasta el momento, el arquitecto encargado del proyecto y la dirección de la obra de la avenida Pavón al 3000, Eduardo Agustín Aguaviva, directivo también de la empresa constructora de los hermanos Caputo, y los responsables de la empresa constructora Lybster S.A., con domicilio en Conde al 2000 de esta ciudad.

Esta compañía había sido denunciada por la UOCRA ante la Dirección General Protección del Trabajo (DGPT), a cargo del arquitecto Fernando Cohen, el 4 de febrero. Para el gremio, el personal no tenía ropa de trabajo, ni cascos, ni calzado de seguridad, protección auditiva y ocular. La obra carecía de señalización y protección en zanjas y excavaciones, exponía a sus trabajadores a pocos metros de la máquina excavadora y tampoco tenía escaleras para salir de las excavaciones.

"Reclamamos justicia para Adrián, que se investigue y que no dejen que los verdaderos responsables queden libres", dijo días el hermano de la víctima, Esteban Continiello. 

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