Historias de nuestra comuna | Patrimonio Histórico y Cultural

La Tipográfica Bonaerense en la Legislatura

En su sesión del 7 de julio pasado, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires declaró Patrimonio Histórico y Cultural a la Sociedad Tipográfica Bonaerense. La aprobación se realizó sobre un despacho de la Comisión de Cultura a partir de un expediente iniciado por el diputado Carlos Tomada (FpV). Buenos Aires, 11 de agosto de 2016. Fundada e l 25 de mayo de 1857, la Tipográfica tiene su sede desde 1904 en nuestra Comuna 3 en el barrio de San Cristóbal sobre la Avenida San Juan 3244, en un edificio que integra el Catálogo de Inmuebles Patrimoniales de la CABA.

Entre los miles de inmigrantes llegados de Europa a mediados del siglo pasado, había muchos perseguidos por sus ideas políticas y por la defensa activa de los derechos de los trabajadores. Cuando se radicaron en nuestro país y a medida que las fábricas se multiplicaban, continuaron luchando para obtener mejores condiciones laborales, a través de la creación de entidades gremiales. Si bien la Sociedad Tipográfica Bonaerense, no era una organización específicamente gremial sino una asociación de socorros mutuos que buscaba el progreso del arte tipográfico, su objetivo fundacional era prestar socorro a los miembros que se enfermasen o imposibilitasen para el trabajo y tratar de asegurar para sus miembros remuneraciones acordes con el trabajo realizado. La Sociedad tuvo importantes socios protectores como Domingo Faustino Sarmiento, Bartolomé Mitre y José Mármol.

En 1877, sobre la base de esta sociedad se constituyó la Unión Tipográfica que tenía más carácter sindical y se formó con el único objeto de trabajar por el adelanto del arte tipográfico, estableciendo una tarifa de salario. Y en 1907 la Federación Gráfica Bonaerense, que es en la actualidad la entidad gremial de los trabajadores gráficos.

En 1878 la Unión Tipográfica declaró la primera huelga organizada que hubo en la Argentina. Los protagonistas fueron los obreros de la industria gráfica que trabajaban en los diarios y que demandaban una reducción de la jornada laboral y un aumento de los sueldos. La huelga se prolongó durante un mes y finalmente, se acordó una jornada de diez horas en invierno y de doce en verano, lo que constituía un cambio bastante favorable considerando las durísimas condiciones de trabajo existentes. Con la primera huelga en Argentina los tipógrafos lograron el aumento salarial buscado, y el establecimiento de la jornada de trabajo de menos de 10 horas. Más importante aún, consiguieron el reemplazo de los niños por adultos para el trabajo y el compromiso de la prohibición de emplear a menores de edad en el futuro. Así, a este acuerdo conformado entre una asociación gremial y la patronal podemos considerarlo como el primer convenio colectivo de trabajo de Argentina.

Hoy la Sociedad Tipográfica Bonaerense es una mutual registrada ante el INAES. En su sede se desarrollan en la actualidad diversas actividades culturales y funciona la Biblioteca, de gran valor histórico pues fue creada en 1863 y es la primera biblioteca obrera del país. Cuenta con aproximadamente 5.000 volúmenes, muchos de los cuales son de finales del siglo XIX y principios del XX entre ellos enciclopedias de los más diversos temas no sólo en castellano, sino también en italiano y en francés; libros en inglés y alemán; colecciones sobre derecho, arquitectura y medicina; y una colección de la revista "Gutenberg" que de manera bimestral editó la Sociedad desde el año 1901.También se pueden encontrar otras publicaciones relacionadas con el oficio y con la historia gremial y política de los trabajadores gráficos.
Norberto Alonso


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