Buenos Aires, 11 de setiembre de 2018. La parroquia Nuestra Señora de Balvanera ubicada en Bartolomé Mitre 2411, esquina Azcuénaga, del barrio de Balvanera y famosa por sus "torres" mencionadas en el poema de Jorge Luis Borges, Milonga para Jacinto Chiclana, celebró el 9 de septiembre sus fiestas patronales, con el lema “Con María de Balvanera seamos refugio de la vida”. La parroquia lució renovada por obras de restauración realizadas con el financiamiento de miles de sus fieles

Los actos comenzaron a las 10 con el rezo del rosario en comunidad. A las 11 se llevó a cabo una procesión por las calles del barrio portando la imagen de la Virgen, a cuyo término se celebró la misa, presidida por el obispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Juan Carlos Ares. Los actos concluyeron con una fiesta familiar a partir de las 13, con servicio de cantina y espectáculos para toda la familia. 

Según la tradición, un hombre llamado Nuño Oñez, ladrón de poca monta, ya cansado de su vida mundana decidió retirarse a las montañas para llorar sus culpas y hacer penitencia y ayuno. Eligió para ello un valle lleno de vertientes de agua en el partido de Nájera, España. 

El pobre pecador buscaba en las cuevas consuelo y encontró, en el hueco de un roble, una imagen de la Virgen María. El lugar del hallazgo fue el Valle de las Venas o Valvanera, de donde toma nombre esta advocación de la santísima Madre de Dios. La sagrada imagen parece de estilo románico y habría sido tallada en el siglo IV o V. 

Junto con un religioso dominico, Nuño construyó una ermita al Santo Cristo, que fue el primer oratorio para la imagen mariana que pronto se convirtió en lugar de peregrinación. Nuestra Señora de Valvanera es la patrona de la Comunidad Autónoma de La Rioja en España. 

En la Argentina, al igual que en algunos otros países como México y Ecuador, el nombre de la advocación aparece con una variante ortográfica, por lo que su nombre comienza con “B”. 

En la ciudad de Buenos Aires, la parroquia nació como un humilde oratorio que se terminó de construir en 1806, con obras iniciadas en 1799. Al crecer la población se requirió una mayor edificación y se construyó el actual templo, que abrió sus puertas el 16 de mayo de 1833. 

La parroquia es a la vez, el santuario arquidiocesano de San Expedito. En esta casa de Nuestra Madre de Balvanera, los fieles depositan sus pedidos y llevan sus agradecimientos al patrono de las causas urgentes. 

Compartir nota en las redes sociales Enviar Imprimir