Buenos Aires, 4 de setiembre de 2018. Lejos quedaron los sueños de Larreta de poder exhibir la nueva concesión como muestra del interés mundial por invertir en el país. Ilusión que lo llevó a efectuar una extensa gira por las principales capitales europeas en mayo del año pasado, promoviendo la oportunidad que se presentaba, como antes lo había hecho por Estados Unidos. Sólo dos grupos extranjeros participaron finalmente en la compulsa, junto al actual permisionario que opera el subte desde que Menem decidiera privatizar esa tarea, pese a que existe una empresa pública en condiciones de hacerla.

El 14 del mes pasado se realizó la presentación de las ofertas. Subterráneos de Buenos Aires (Sbase) informó que tres grandes consorcios internacionales presentaron ofertas. Se trata de las francesas RATP Dev Argentina y Keolis/Helport (sociedad entre la operadora del Metro de Lyon y la Corporación América de Eduardo Eurnekian). El tercer oferente es Metrovías de Benito Roggio Transporte, con asesoría de Siemens y la Deutsche Bahn, empresa estatal ferroviaria alemana.

En dos de los tres casos aparecen formando parte de los consorcios, empresarios denunciados en la causa de coimas en la obra pública que tomó estado público a partir de las fotocopias de los cuadernos Gloria del remisero Centeno. Sin embargo, esa no ha sido causa para que la administración de Larreta deje afuera a Roggio de la nueva licitación.

Según explicaron en Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (Sbase), la Justicia tendrá tiempo suficiente para aclarar la situación del mandamás del grupo, a la par de que avance el proceso licitatorio. O por lo menos, se aferran a esa creencia.

No todos piensan lo mismo. Los diputados porteños Bregman y del Corro presentaron un proyecto en la Legislatura para reclamar la derogación del decreto N°469/17, firmado por Larreta en diciembre del año pasado y que prorrogó la concesión del servicio del subte a la empresa Metrovías. 

En los fundamentos del proyecto de ley, Bregman y del Corro argumentan que "el empresario Aldo Roggio, cuya empresa está a cargo de la concesión del Subte, salió del juzgado de Bonadío convertido en un nuevo empresario arrepentido". Bregman sostuvo, que "mientras el titular de esta empresa reconoce abiertamente haber pagado coimas en su gestión del Subte, sigue lucrando con un servicio público esencial y sigue recibiendo subsidios millonarios". Queda en el aire una pregunta. Si la prórroga de la concesión la hizo Larreta, ¿quién cobró las coimas?

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