Buenos Aires, 10 de julio de 2018. El Consejo Consultivo Comunal es la instancia deliberativa y de participación vecinal contemplada por la Ley 1.777 de Comunas para canalizar las inquietudes de los habitantes de nuestros barrios y articular con la Junta Comunal elegida, integrada por siete miembros en proporción a los votos de cada espacio político.

Pensada como espacio de integración de las asociaciones existentes en las Comunas, siempre previó que la integrasen vecinos, muchos de ellos comprometidos políticamente. En la práctica y dado el vaciamiento operado desde la gestión macrista desde antes de implementarlas, las Comunas apenas son un apéndice de la administración central, que continúa manejando los presupuestos y las políticas que deberían estar descentralizadas, según lo estipulado por la Constitución. 

Así las cosas, las entidades no gubernamentales que se radican en Comuna 3 no tienen mayor interlocución  con la Comuna, salvo para despachar trámites. Y cuando requieren de alguna decisión política, interactúan con los niveles centrales de gobierno. No es extraño que estén ausentes en el Consejo Consultivo Comunal, espacio que debían habitar de acuerdo con lo estipulado por la normativa vigente que el macrismo desconoce a diario en sus acciones.

Pese a estos obstáculos, semestralmente se renuevan entre nosotros los esfuerzos por promover esa instancia participativa vecinal que ha sido capaz de potenciar iniciativas de indudable impacto comunitario como la ganada Manzana 66, verde y pública, actualmente en proceso de reconversión, y el demorado Parque de la Estación, un viejo anhelo de los vecinos de la barriada de Balvanera, lindante con Almagro.

Para el próximo semestre, que esperemos sea más venturoso en este plano que el que nos espera como país, los entusiastas que asumieron este noble propósito son Martín Imaz, Hugo Valdéz, María Rosa Olano, Alejandra Laguzzi, Valentina Hijós, Verónica Vigna y Sofía Olivera. Los secundarán Bárbara Iñiguez, Candela Beno, Verónica De Luca, Rita Ortiz, Mónica Montenegro, Martín Gajst y Cecilia Etchecopar.

Al tiempo que resolvieron los nombres de los nuevos integrantes de la Junta Promotora, los participantes de la última sesión del Consejo Consultivo Comunal aprobaron la versión final de los doce puntos de la Propuesta Urbano Ambiental que generaron en forma participativa a través del trabajo de diferentes talleres de elaboración. 

Esta Propuesta Urbano Ambiental de los vecinos va a ser presentada formalmente a la Comisión de Planeamiento Urbano de la ciudad, para que las ponencias allí expuestas, sean tratadas e incorporadas a los contenidos del código urbano o de edificación, según corresponda. 

Las iniciativas están contenidas en doce puntos que abarcan las diferentes temáticas de la agenda urbano ambiental. Ellos son:

1- Espacios verdes públicos y recreativos en los barrios y las comunas para todos.

2- Accesibilidad permanente de la peatonalidad. 

3- Servicios de infraestructura concordantes con las necesidades poblacionales y edilicias.

4- Espacio urbano ambientalmente saludable. 

5- Paisaje y patrimonio urbano ambiental barrial sostenible.

6- Ampliaciones y nuevas construcciones físicamente seguras y accesibles.

7- Movilidad y sistema de transporte público complementario y transversal con centros de trasbordo multimodal.

8- Sistema efectivo de construcción y mantenimiento de los equipamientos educativo, sanitario, recreativo, deportivo y cultural.

9- Acceso a la propiedad de la vivienda y regulación de los alquileres. 

10- Minimización y reciclado de los residuos urbanos. 

11- Reurbanización de las villas.

12- Participación ciudadana directa en los temas urbano ambientales.

Como se puede apreciar en una rápida lectura, se trata de un extenso abanico de asuntos nodales para asegurar una mejor calidad de vida a todos los habitantes de esta ciudad, tan avara con las necesidades de los más postergados. El documento íntegro puede consultarse desde nuestra web, sintesiscomuna3.com.ar, con el link https://drive.google.com/file/d/1Z2hd0ss_YtwlAfOwHwb4B51inzxwZxza/view?usp=sharing 

Alguno lo podrá desdeñar por utópico, como si las utopías fueran despreciables y no sirvieran de horizonte para todos los que anhelan transformar la realidad. Se trata por el contrario, en opinión de este medio, de una cabal muestra de la madurez ciudadana que anida en los espacios de participación, desde los cuales se intenta con suerte diversa y con un fuerte espíritu solidario, hacer de esta Buenos Aires una ciudad inclusiva con mejor ciudadanía para todos sus habitantes.    

Muchas veces anónimo, ese esfuerzo tiene una fuerte tradición en nuestros barrios. Valga como ejemplo un aviso contenido en la edición del 30 de junio del diario Página 12. Allí se comunica que el próximo 31 de julio se realizará una Asamblea General de Asociados de la Sociedad Tipográfica Bonaerense de Socorros Mutuos, en su sede de Av. San Juan 3244. A muchos, poco les dirá ese nombre y tampoco reconocerían a sus integrantes, pero hace 161 años esa Sociedad dio comienzo a la historia de nuestro movimiento sindical, el más importante de Sudamérica. La historia grande es la suma de esos pequeños pasos.

Lic. Gerardo Codina

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