Buenos Aires, 3 de abril de 2018. Una familia sin techo logró que la Justicia porteña los indemnice por la muerte de su bebé, ocurrida por una neumopatía en julio de 2010, cuando vivían bajo la Autopista 25 de Mayo a falta de un hogar propio. La Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario confirmó la sentencia de primera instancia que obliga al Ejecutivo porteño a indemnizar a los padres y a los cinco hermanos del chico por daños y perjuicios.

La madre estaba embarazada cuando la familia dejó de percibir el subsidio habitacional de parte del gobierno porteño. La familia tuvo que instalarse bajo la Autopista 25 de Mayo, entre las calles Pichincha y Cochabamba, de San Cristóbal. El bebé era recién nacido y enseguida desarrolló una neumopatía que le costó la vida.

El primer fallo estuvo a cargo del juez Víctor Trionfetti pero fue apelado por la Ciudad, que alegó que no había nexo causal entre la muerte del bebé y su situación de calle. Según explicaron, se le había ofrecido a la familia refugiarse del frío en un parador. Como se desprende de la causa, la madre del pequeño no aceptó "ya que no los dejaban llevar sus pertenencias y no podían permanecer allí durante el día". En esos paradores además, son separados los hombres de las mujeres, por lo que la familia no podía permanecer reunida.

En la causa consta que el Gobierno porteño reconoció la prioridad en el acceso a un subsidio habitacional para la familia, pero como ese beneficio no se mantuvo en el tiempo, empujó a la calle a todo el grupo (padre, madre embarazada, y cinco hijos menores de edad).

Nada podrá calmar el dolor de la madre del bebé, y la exigua indemnización tampoco resolverá la precariedad en la que desenvuelve su vida esa familia, pero el tardío fallo pone el foco en la responsabilidad del Estado sobre la situación de la población. Una situación que cada vez afecta a más personas que viven en la Ciudad. 

Según el Primer Censo Popular de la Ciudad de Buenos Aires, 5.872 personas vivían en situación de calle en 2017, de los cuales 823 eran niños. Ya en ese momento se advertía que 20.000 más estarían en riesgo en el corto plazo si no se implementaban las políticas habitacionales necesarias.

El acceso al techo digno es un derecho humano básico que no puede estar vacante de políticas públicas activas. A lo largo de décadas en la Ciudad se procedió con parches, con políticas pobres para pobres, y esos parches terminan en tragedias. En su mayor parte invisibilizadas por los grandes medios. Como excepción, este caso puso de relieve cuáles son los costos sociales y humanos de un estado ausente de estas políticas.

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