Comunales | Venta de la sede de Once

Hebraica decide en octubre

La posible venta de la sede principal de la Sociedad Hebraica Argentina (SHA), ubicada en Sarmiento al 2200, quedó en suspenso para ser definida tras la próxima elección de autoridades en octubre. La iniciativa desató una intensa polémica y especulaciones sobre sus reales motivaciones. Buenos Aires, 6 de junio de 2017. La noticia de adquisición de la sede de Balvanera se conoció a principios de año. Las autoridades de la SHA habían convocado una asamblea de socios en el country de Pilar el 29 de abril para resolver la cuestión. Querían vender, alegando que el viejo edificio de Once genera pérdidas, es poco usado hoy día y está desactualizado.

La reacción de muchos se hizo notar incluso en la calle. El 18 de abril unas 200 personas cortaron Sarmiento enfrente de la entidad. Entre tanto, múltiples reclamos se hicieron ante la Inspección General de Justicia (IGJ), organismo oficial que supervisa la vida social de las asociaciones civiles, denunciando diversas irregularidades en la convocatoria a asamblea. “Querían hacer la asamblea en Pilar, cuando la sede legal es en Once, no había número certero de socios, la Justicia nos dio la razón”, relató Samuel Muzykanski, ex tesorero de Hebraica.

La IGJ se hizo eco de los reclamos y suspendió la asamblea del 29 de abril, que se iba a realizar en Pilar. Después de eso, las autoridades de Hebraica debieron dar un paso atrás y postergaron la discusión para octubre, cuando haya elecciones generales y recambio de conducción.

En 2015 el gremio de los porteros (SUTERH) había adquirido parte del edificio, del piso 5° al 14° por U$S 3,5 millones, para instalar parte de su Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo, algo que aún no hizo. Ahora pretendía quedarse con todo. Para eso, hizo una oferta tentadora. 11,5 millones de dólares, a pagar la mitad al contado y el resto en 18 meses a fin de obtener por completo la sede de la calle Sarmiento para su universidad.

A favor y en contra de la venta

Los directivos de la SHA están a favor de aceptar la oferta. “La Hebraica tiene 6.500 socios, pero en los últimos años a la sede de Sarmiento van menos de 200. Se ofrecen entre 70 y 80 actividades, pero la gente no concurre, porque más del 80% de nuestros socios ya no vive en el Once. La mayoría se mudó al corredor norte", dijo el presidente de la Hebraica, Diego Dinitz.

El edificio genera un déficit de más de un millón de dólares por año. “El costo mensual para sostenerla es de $1.436.000. Además, el edificio quedó obsoleto. Las canchas no cumplen con las medidas que exigen los reglamentos actuales. La pileta en altura tiene una habilitación precaria. Y no se justifica invertir en una sede adonde nuestros socios no van”, insistió el presidente de la Hebraica.
Pero hay socios que se oponen a la venta: “El valor de este edificio no se puede medir con plata. Ya atravesamos otras situaciones posiblemente mucho más graves y comprometidas que ésta, y siempre las personas que presidieron la institución encontraron y tuvieron la creatividad y la inteligencia para superarla. No creemos que esto sea diferente de otras veces”, indicaron en un comunicado, donde acusan que la mayor parte de las actividades se trasladaron a Pilar.

“No es lógico que se venda un edificio de esta envergadura al primer interesado y sin realizar una oferta pública. El SUTERH hace dos años compró una parte sin ingreso exterior. Se había comprometido a hacerle una entrada independiente, pero no la hizo. Y Hebraica no usó los fondos de aquella venta para reformar la sede de Once ni para sanear el déficit. Los invirtió en el country de Pilar. Acá hay un tema ideológico, porque un club social y deportivo es para incluir, no para dar ganancias”, cuestionó el socio Miguel Goldcher.

Por su parte, Santa María confirmó que se realizó la oferta, y dijo que “nos interesa el edificio porque nos permitiría cumplir el fin de poder darles educación a nuestros afiliados a través de nuestra universidad. Es un patrimonio cultural de todo el país, la idea es ponerlo en valor”.

Emblema de la colectividad

La SHA tiene más de 90 años. Fue fundada el 16 de abril de 1926 y su socio honorario número 1 fue Albert Einstein. Primero la institución funcionó en la avenida Callao, después se mudó a la avenida Alvear y en la década del 40 se instaló en la calle Sarmiento. En los años 60 se sumó la sede de Pilar, que tiene 130 hectáreas y 800 viviendas.

Desde 1968, la sede de Once cuenta con un importante teatro, donde también funcionó la Cinemateca Argentina. Además, en el edificio hay siete murales de los artistas Antonio Berni, Eduardo Castagnino, Demetrio Urruchúa, Antonio Sibellino, Juan Batlle Planas, Luis Seoane López y Leo Vinci, que en 2015 fueron declarados Patrimonio Cultural de la Ciudad. También se destaca la biblioteca, con más de 40.000 volúmenes, algunos de ellos incunables.

Según Dinitz, si el SUTERH compra el edificio tendrá la obligación de conservar los murales y el teatro. Y los socios de la SHA podrán seguir usando las instalaciones por tres años. Mientras, la biblioteca será mudada a un petit hotel en Ciudad de la Paz al 1000, que la Hebraica recibió del Suterh como parte de pago por la compra de 2015.


Santiago Pujol

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